La Patria Grande es una utopía realizada. Porque tenemos historia y destino comunes. En 1826, Simón Bolívar convocó a un congreso americano que fue el primer intento concreto de alcanzar la unión de las repúblicas latinoamericanas. Surgía la Patria Grande. La que nombra Artigas y la que describe, pionero, Manuel Ugarte en su libro “El destino de un continente” de 1923. Ahí nos dice: “Pero mi patria, ¿es acaso el barrio en que vivo, la casa en que me alojo, la habitación en que duermo? ¿No tenemos más bandera que la sombra del campanario?”
Este proyecto de unificar políticamente a las naciones, resucita pese a los intentos de destruirlo. Pensando en que no podemos amar y luchar por esta patria si no la conocemos, sumo mi granito de arena. En dos páginas diferentes, postales e historias de encuentros y magias compartidas.